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Dos presos se fugaron de una comisaría luego de cortar con una sierra los barrotes del calabozo

El caso ocurrió en una seccional ubicada en la zona noroeste del Gran Buenos Aires. Los investigadores policiales buscan a los prófugos.


Dos presos fugaron de una comisaría, luego de haber cortado, con una sierra, los barrotes de una puerta del calabozo de contraventores en el que se hallaban alojados, en un confuso suceso que se registró en el noroeste del conurbano bonaerense, informó Crónica.


Voceros judiciales revelaron a cronica.com.ar que los evadidos fueron identificados oficialmente como Nahuel Emiliano Carusi, de 28 años, y Ariel Leonardo Sánchez, de 25.


Según agregaron los informantes, el hecho, que aconteció en la jornada del sábado, pero que se conoció este lunes, se produjo en la seccional situada en avenida San Martín al 1900, muy cerca del cruce con la calle Entre Ríos.


Trascendió que uniformados que llevaban a cabo tareas de vigilancia lograron observar que dichos individuos habían cortado, mediante la utilización de una sierra, los barrotes existentes en la parte inferior de la puerta de una celda de contraventores, en la que habían sido alojados escasas horas antes y tras una supuesta pelea, que se asegura que mantuvieron con otros reclusos. La mencionada abertura tenía una medida de veinte por cincuenta centímetros.


Intervino en esta causa penal, que de manera preventiva fue caratulada “Evasión”, el doctor Martín Viscovich, fiscal de la Unidad Funcional Descentralizada N° 22 de los tribunales de la jurisdicción, quien resolvió convocar a miembros de la Dirección Departamental de Investigaciones (D.D.I.) de la zona para buscar a los fugados y también a peritos de la Policía Científica para la realización de varias diligencias en el escenario del ilícito.


Hasta el momento, se cree que los sujetos habrían escapado de la comisaría por una puerta instalada en el sector trasero del inmueble, estimándose que posteriormente huyeron por las fincas vecinas.


Antecedentes

Al respecto, se dice que Carusi se encontraba sindicado de “Lesiones agravadas y atentado y resistencia a la autoridad”, en tanto que Sánchez estaba sospechado de los delitos de “Amenazas y violación de domicilio”.

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